La constructora e inmobiliaria valenciana presentó hoy en el Juzgado Mercantil número dos de Valencia la petición de concurso voluntario de acreedores para las seis empresas que conforman el grupo.La empresa se suma a Astroc, aunque con la importante diferencia de que Astroc ha perdido valor de mercado vertiginosamente, pero no se encuentra en cese de pagos hasta el momento.
La compañía valenciana reconoce su situación de "insolvencia inminente" de cada una de sus seis empresas. Un panorama que se ha producido tras la negativa de muchas entidades financieras a estructurar deuda a largo plazo.
Es decir, que los bancos ya no querían prestar más dinero a la compañía para que hiciera frente a sus pagos. De esta manera, Llanera se convierte en una de las primeras víctimas del cambio de ciclo inmobiliario que vive el sector. En este caso, los retrasos para la tramitación urbanística de los proyectos de Llanera le han llevado a esta situación.
De las noticias recientes que anticipaban este estado, es de destacar que una parte importante de la deuda de Llanera está en poder de las cajas valencianas. Según Las Provincias, hace unos días:
La constructora valenciana Llanera prevé salir de las dificultades de tesorería que le atenazan desde hace algún tiempo abonando parte de la deuda que ha contraído con las cajas valencianas, Cam y Bancaja, dos de los principales acreedores, con parte del suelo que tenía destinado a aumentar el negocio.Mientras tanto, persiste una tendencia a desestimar los signos que continúan apareciendo. Quizá la idea sea que algunos caerán, pero la salud continuará...
(...)La constructora tiene además que introducir cambios relevantes en su estrategia a medio plazo. Fuentes financieras han señalado que la compañía ha puesto sobre la mesa una reorientación del negocio apoyada más en la construcción de vivienda que en la de la segunda residencia. Incluso algunas promociones que se habían ideado pensando en inversores británicos se están intentando colocar a clientes de la zona de la actuación.
También se han paralizado algunas actuaciones e incluso se ha renunciado a cerrar algunas compras de suelo acordadas aunque haya supuesto perder la reserva que se había hecho para señalar el terreno.
(...)las cajas de ahorro Cam y Bancaja, mantienen una actitud de lo que alguno ha calificado como “prudente responsabilidad” con buena disposición para ayudar a evitar que el problema alcance mayores proporciones. El temor más extendido es que la caída de una gran marca pueda provocar un efecto dominó de nefastas consecuencias en el sector e incluso fuera de él.
En ese marco también se comenta el aumento de morosidad en los pagos hipotecarios, por ejemplo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario