martes, diciembre 19, 2006

Andrés Oppenheimer: Latinoamérica no debe sobreestimar el momento

La Nación publica un breve artículo de Andrés Oppenheimer sobre el momento de bonanza que vive Latinoamérica, recordando lo dicho hace pocos días en Santiago de Chile por Kenneth Rogoff: el crecimiento no tiene bases sólidas, y se apoya especialmente en un buen momento de los commodities:
Dice Oppenheimer:
El crecimiento latinoamericano se debe principalmente a factores externos, como los altos precios de las materias primas, la fuerte demanda de Estados Unidos y China, las bajas tasas de interés internacionales y el nivel récord de remesas familiares enviadas por los latinoamericanos que viven en Estados Unidos. Y estos factores externos no durarán para siempre.
Las Naciones Unidas y el BM prevén una disminución en la actividad económica mundial, que tendrá un impacto en la región. ¿Qué puede hacer América latina para mantener sus tasas de crecimiento altas por décadas, como China y la India?
La mayoría de economistas internacionales coinciden en que, como primera medida, los países latinoamericanos deberían dejar de engañarse a sí mismos pensando que han crecido en los últimos años por la brillantez de sus decisiones internas o -en algunos casos- por sus posturas contra la globalización.
De hecho, ha ocurrido exactamente lo contrario: América latina está creciendo a tasas más bajas que todas las demás regiones en desarrollo precisamente porque no ha aprovechado las oportunidades de la globalización como otras regiones.
Oppenheimer propone ir más allá de las materias primas, encauzando recursos que hoy están disponibles, para sentar bases más sólidas de crecimiento:
América latina debería aprovechar su actual estabilidad económica como una oportunidad de oro para invertir en educación, ciencia y tecnología, cosa de añadir valor agregado a sus exportaciones y reducir su dependencia de los precios de las materias primas. Aunque parece difícil de creer, mientras China hizo obligatorio el inglés en todas las escuelas públicas a partir del tercer grado, México, la Argentina y la mayoría de América latina empiezan a enseñar inglés cuatro años después, en séptimo grado.
(...) los países latinoamericanos deberían crear un mejor clima de negocios y reducir la burocracia estatal para atraer más inversiones. Sorprendentemente, mientras en China se requieren 13 trámites legales para abrir un negocio, en la Argentina se necesitan 15, en Venezuela 16 y en Brasil 17.
¿Cuántas veces se ha dicho esto? ¿Es algo desconocido para quienes pueden tomar decisiones? ¿Qué es lo que nos detiene?

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