sábado, mayo 30, 2009

La banca española, negocios seguros

El sistema bancario español pasa por ser un modelo robusto, capaz de resistir con éxito la mayor crisis financiera y económica de los últimos cincuenta años. Una verdad relativa, conocidas las dificultades en curso para sostenerse por su exposición a inversiones en el sistema norteamericano o europeo, y mucho más por su todavía irresuelta dependencia de las inversiones inmobiliarias.
Pero hay un aspecto más, que podría cambiar radicalmente sus cuentas. Un aspecto que la crisis social ha puesto sobre la mesa de los políticos: la situación de esclavitud práctica a que un deudor hipotecario se expone legalmente al tomar una hipoteca. Al avanzar la crisis y aumentar el número de parados incapaces de pagar su deuda, comienza a presionarse para modificar la legislación, reduciendo la obligación del deudor hipotecario al pago de su cuota, desligándolo de la aberrante situación de persistir su obligación si el remate de su vivienda no cubre el monto de la deuda. Se ha comenzado a materializar la inconcebible situación de que una persona que ha perdido su casa, que quizá no tenga trabajo, además deba garantizarle al banco la integridad del capital prestado, mas todos sus intereses, si acaso el remate no cubriera el monto total comprometido. Y esto, garantizado por un gobierno que evidentemente se ha comprometido a sostener este modelo.
Los hechos recientes, en El Confidencial (es curioso que los temas importantes salgan sólo en publicaciones de circulación reducida):
La batalla política contra la obligación legal de responder con todos los bienes en caso de embargo hipotecario está en marcha. La inició Izquierda Unida en la Asamblea de Madrid, que la semana pasada presentó una proposición no de ley contra la actual legislación nacional, El guante lo recogió el Grupo Popular en el parlamento regional, que sorprendentemente respaldó la iniciativa de la coalición de izquierdas. Pero ahora ha sido la vicepresidenta económica quien ha puesto pie en pared. Salgado dejó ayer bien claro que el Ejecutivo no tiene ningún interés en cambiar la norma, toda vez que “son las entidades financieras las que exigen garantías”.

El asunto, sin embargo, lejos de haberse cerrado tiene todavía mucho recorrido parlamentario. Según Gregorio Gordo, el diputado que defendió la proposición no de ley en la Asamblea de Madrid, Izquierda Unida volverá a plantear el asunto, aunque esta vez ante el parlamento nacional. Pero ahora con el PP como aliado en caso de que el Grupo Popular en el Congreso revalide la posición de los diputados de Esperanza Aguirre.

Lo que está en juego es extremadamente delicado para la banca, que cuenta con un blindaje legal en caso de que el propietario de una vivienda no pague los recibos correspondientes. La Ley Hipotecaria establece que la hipoteca podrá constituirse en garantía de toda clase de obligaciones del deudor, y no alterará la responsabilidad personal ilimitada que establece el Código Civil. ¿Y qué dice el Código Civil?, pues ni más ni menos que “del cumplimiento de las obligaciones responde el deudor con todos sus bienes, presentes y futuros”, aclara la norma.
La banca, y quizá también algunas áreas de servicios de caracter monopólico u oligopólico, no están interesados en el riesgo en los negocios: se mueven con garantías inconcebibles en otros países, como recuerda la nota de Carlos Sánchez:
Quiere decir esto que el riesgo de depreciación de los activos inmobiliarios no corre a cargo de la entidad financiera que presta el dinero, como sucede en los países anglosajones, sino del propietario, que debe responder por la hipoteca con otros bienes ajenos a la vivienda, aunque el valor del piso caiga en picado, como está sucediendo en algunas zonas del país. Es decir, que el piso puede valer menos que la hipoteca. La situación es todavía más paradójica si se tiene en cuenta que la mayoría de las compañías de tasación inmobiliaria pertenece a la banca, lo que puede provocar problemas de conflicto de intereses.
La comparación es destacada también en otro artículo posterior de Eduardo De Segovia, en el mismo medio. Segovia deja en claro cuál sería el impacto patrimonial para los bancos:
...en el sector se considera que este cambio sería un auténtico terremoto puesto que supondría la instauración del sistema norteamericano por el que, cuando el precio de la vivienda baja por debajo del importe del crédito, basta con devolver las llaves del piso para dejar de pagar la hipoteca. Algo que ya están sufriendo de facto las entidades cuando el titular del préstamo es un extranjero. Eso dispararía la morosidad y, en consecuencia, las provisiones y las pérdidas de bancos y cajas en un momento en que ya hay algunas entidades que luchan por sobrevivir. Aparte de disparar hasta la estratosfera el volumen de inmuebles que tendrían que 'comerse' las entidades.
(...) Ahora bien, otros no ven con malos ojos estos efectos, porque por fin se produciría el desplome del precio de los pisos que numerosos expertos consideran imprescindible para salir de la crisis. Asimismo, esta norma obligaría a la banca a abandonar las prácticas irresponsables de concesión de crédito de los últimos años: tasaciones estratosféricas, préstamos por más del 100% del valor del piso, letras que suponen un enorme porcentaje de los ingresos del hipotecado, plazos irracionales de amortización, etc.
Una crisis nacional, paralela a la arrastrada por el quiebre del sistema internacional, que no terminará sin cambios en el modelo de negocios interno.

miércoles, mayo 27, 2009

Roma no paga traidores?


En La Nación, pero también en toda la prensa (Diario Uno, Crítica, Noticias 24, etc):
Los dichos de Hugo Chávez a Lula Da Silva sobre su intención de proteger las empresas brasileñas de la estatización que promueve en Venezuela generaron malestar en la Casa Rosada. Tanto, que Cristina Kirchner se comunicó anoche con su par venezolano para pedirle que aclare sus polémicas declaraciones.

La conversación telefónica trascendió cerca del mediodía a través de un cable de la agencia Télam. El despacho indica que Chávez le negó a la Presidenta haber hecho esas afirmaciones, por lo que la jefa del Estado le solicitó que realizara una desmentida pública. El venezolano, a su turno, se comprometió a aclarar sus dichos no bien regrese a Caracas.

El contacto telefónico y los ejes de la conversación entre los mandatarios fueron confirmados a lanacion.com por fuentes oficiales.

A micrófono abierto. "Estamos en una fase de nacionalización de empresas en el país.. menos las brasileñas", aclaró Chávez ayer durante su reunión privada con Lula en la ciudad brasileña de Salvador. El comentario sólo trascendió gracias a un descuido. Los audífonos para escuchar a los traductores presidenciales quedaron abiertos y los periodistas pudieron escuchar los primeros minutos del diálogo.
Si no alcanzaran los intereses "patrióticos" pagados a los préstamos venezolanos, las nacionalizaciones de empresas argentinas muestran la indignidad de justificar que otro país medre con nuestras empresas ("Cristina pidió respetar “las decisiones soberanas de cada país” y argumentó que “tampoco nosotros aceptaríamos que nadie se entrometiera en una decisión soberana”", recogido por Crítica). Y mientras el gobierno argentino calla y otorga, Chávez se rinde frente al poder, cuidándose muy bien de aclararle a Brasil que sus empresas no están amenazadas. Una vez más, Brasil nos muestra la diferencia entre querer al propio país, y no hacerlo.
Por cierto...estamos en la semana de mayo, y a un año del Bicentenario.

sábado, mayo 23, 2009

Incompetencia suicida

¿Tú también, Bruto? En vísperas de un aniversario de nuestras fiestas patrias...una agresión más de nuestro principal aliado sudamericano (y como dicen aquí en España, "y que Dios nos pille confesados")
¿A qué han reducido el papel de Argentina?
En Clarín, hoy sábado 23 de mayo:

Enérgico rechazo empresarial a nuevas estatizaciones de Chávez

Las principales cámaras privadas argentinas expresaron su "preocupación y repudio" por la nacionalización de tres compañía ligadas al grupo Techint. Y reclamaron al Gobierno que defienda los "legítimos intereses del país" en el exterior.

Fue un efecto dominó que casi hace colapsar los celulares de los hombres de negocios más poderosos del país. Desde que la Unión Industrial difundió un comunicado de prensa repudiando el anuncio de una nueva nacionalización por parte del gobierno venezolano a tres fábricas que eran de Techint, otras cuatro cámaras empresarias (que representan a otros sectores) se plegaron públicamente con ese mismo cuestionamiento. Reclamaron que los Estados respeten la actividad privada.

Según las más altas fuentes consultadas en cada entidad, lo que desencadenó ese efecto dominó fue el silencio de la Casa Rosada sobre la decisión del presidente venezolano Hugo Chávez. Tal vez por esa razón, todos los comunicados empresarios reclamaron al Gobierno que tome cartas en el asunto. Anoche, en las entidades había llegado el mensaje de que la presidenta Cristina Kirchner le había pedido al canciller Jorge Taiana que tomara el tema.

"Las inversiones argentinas en el exterior son parte fundamental de la proyección internacional de nuestro país. En este sentido AEA valora toda mediación del gobierno argentino ante Venezuela para evitar que esta acción se concrete", disparó la Asociación Empresaria Argentina que agrupa a los CEO's de las 100 empresas que más facturan en el país.

El documento de la UIA fue más duro: "La UIA solicita al Gobierno Argentino que arbitre los esfuerzos tendientes a revertir esta situación y defender los legítimos intereses de nuestro país en el exterior". En la misma línea estuvieron los documentos de la Cámara Argentina de Comercio, Adeba y ABA (bancos) y CEMCI (Medios de Comunicación).

Hubo otros hombres de negocios que se pronunciaron de manera individual como Sebastián Ezkenazi, la máxima autoridad ejecutiva de YPF, quien consultado por este diario formuló un "enérgico rechazo a la decisión del gobierno venezolano".

El texto de la UIA surgió luego de una reunión de casi cinco horas en la sede fabril, que preside Héctor Méndez. Techint es uno de los principales socios de esa entidad y otra de sus plantas venezolanas, Sidor ya fue nacionalizada en ese país, en abril del año pasado, y que acordó que será indemnizada por un total de 1970 millones de dólares por parte del gobierno venezolano.

¿Qué cambió esta vez?. "Estamos absolutamente sorprendidos por la decisión del presidente Chávez", le dijo a Clarín Luis Betnaza, el directivo de Techint en Buenos Aires y hombre de confianza del dueño, Paolo Rocca, quien habría hecho varios de los llamados que desencadenaron el repudio de las entidades privadas.

La semana próxima habrá un encuentro de dirigentes empresarios. Allí se sumarían consensos en torno a una idea que AEA ya plasmó: el reclamo a que los Estados respeten la actividad privada. "El derecho a la propiedad de las empresas sobre su patrimonio y sus ganancias es fundamental para el desarrollo económico", dijo el texto.

En la siderúrgica argentina hubo silencio pero sus voceros insistieron en que se enteraron de la decisión de Chávez por un llamado de la sede en Venezuela.

La sorpresa que habría causado en Techint el anuncio también despertó suspicacias en directivos de otras entidades. En especial porque Chávez acaba de visitar el país y se reunió con la Presidenta en El Calafate, desde donde regresó a Caracas el domingo pasado.

sábado, mayo 16, 2009

Una semana en Castellón




A comienzos de mayo, en plena primavera y con muy buen sol, hicimos una semana de vacaciones en Castellón, que todavía no conocía. Me sorprendió encontrar una provincia quizá más fuerte en su economía que Valencia. Fortaleza que hay que relativizar, si como me cuentan, muchas de sus grandes empresas están vinculadas a la construcción. Villareal, Sagunto, Castellón de la Plana, aparecen como industriales antes que nada.
Pero siguiendo hacia el norte, además del omnipresente turismo de la Comunidad Valenciana, se ve una agricultura extendida y cuidada. Naranjos y olivos en todos los valles.
Nuestro destino fue Alcossebre (o Alcocéber, en castellano), un lugar tranquilo rodeado de naranjos y bosques de pinos, y Alcalá de Xivért, la ciudad principal del municipio. Cuando decimos "ciudad principal", estamos hablando de poblaciones de menos de diez mil habitantes, rodeadas de campo, bosques, mar, y montaña.
Una vez más, la historia está presente, y desde tiempos remotos. Las mismas líneas que más al sur: población desde el paleolítico, paso de íberos, romanos, árabes...En el camino hemos visto el gran castillo de Sagunto, las torres de vigilancia y defensa, el castillo de Oropesa, y finalmente, el castillo de Alcalá de Xivert, que visitamos.
Buscando información, no aparecen muchos datos de la habitación árabe, pero la historia se hace más clara a partir de la conquista del rey Jaime. También aquí tras la conquista se dió la coexistencia de las dos sociedades, hasta la expulsión de los moriscos. El castillo de Alcalá de Xivert muestra las dos etapas: la base y el poblado (en ruinas), musulmán. La fortaleza superior, cristiana. Jaime le cedió el castillo a la orden de los templarios, para luego pasar a la orden de Montesa. Hoy el castillo está en ruinas, aunque un equipo de arqueólogos trabaja en su recuperación.
La información de Wikipedia es bastante completa:

Numerosos hallazgos arqueológicos permiten afirmar la presencia humana en el término de Alcalá de Chivert desde muy antiguo. Industria lítica epipaleolítica, en torno al año 9000 a. C., se ha encontrado en la Cueva de los Diabletes, junto con cerámica del neolítico medio e industria lítica del neolítico final. Del eneolítico se han encontrado restos cerámicos en la Cueva de la Torrera. Se constata la presencia de materiales traídos por los pueblos comerciantes, como un escarabeo egipcio en la necrópolis de la Solivella, así como cerámica púnica y griega en diversos yacimientos.

De época ibérica se encuentran abundantes restos arqueológicos: Poblados como El Palacio y El Tossalet, necrópolis como La Solivella, el yacimientos más importante de este periodo, y El baixador d'Alcossebre, lápidas escritas, restos cerámicos y metales en El Corral de Royo, Pulpis, Irta y Chivert, monedas en Regalfarí, Alcalá y Chivert, y enterramientos dispersos en Capicorp, Palaba y Alcocéber, que demuestran una densa red de poblamiento en dicha época.

La romanización se constata en la presencia de lápidas funerárias en el Corral de Royo, Corral Blanco y Almedixer, y en la vía que cruzaba de norte a sur el término por el llano de Alcalá.

Los vestigios medievales más antiguos son los de la fortaleza y la medina árabe de Chivert, con lienzos de muralla de los siglos X-XII. Con la conquista cristiana del territorio, la Orden del Temple, organiza la bailía de Chivert con la concesión de la carta puebla a su población musulmana de Chivert en 1234, a los nuevos asentamientos cristianos de Alcalá (1251); Alcocebre (1261); Almedíjar y Castellnovo (1261). De entre ellas pronto destacará Alcalá, que se convertirá en cabeza de la encomienda. Extinguido el Temple, la nueva Orden de Montesa pasa a ejercer la señoría de la encomienda. En época moderna una serie de ataques vinieron a caer sobre la población: el poblado mudejar de Chivert fue saqueado por Estellés en 1521; en 1547 un ataque de piratas berberiscos es rechazado por la población de Alcalá, así como otro a la torre vigía de Cap i Corp en 1586. Una vez unida la Encomienda a la Corona en 1592, y tras la expulsión de los moriscos, se intentó repoblar el poblado de Chivert, lo que fracasó, y se hubo de añadir éste, junto con Santa Magdalena de Pulpis, a Alcalá en 1632. Alcocéber que había obtenido su segunda carta de población en 1330, fue incorporado a Alcalá en 1663. En el siglo XIX se produjo la segregación de Santa Magdalena de Pulpis y el gran crecimiento de la población que pasó de los 800 vecinos (unos 3.200 habitantes) en tiempos de Cavanilles, a finales del siglo XVIII, a los más de 6.000 habitantes de 1900. El siglo XIX dio cabecillas a la causa carlista, (de entre los cuales destaca en la tercera guerra, Pascual Cucala), razón por la cual fue duramente reprimida la villa, tras la victoria liberal. En el siglo XX, después de los desastres de la guerra civil, se vio sumida en una regresión económica, propiciada además por su agricultura de secano, situación que se fue modificando sensiblemente desde los años 70 por la extensión del regadío y el auge del turismo en la costa de Alcocéber y Cap i Corp.

Y también un artículo del diario Las Provincias:
EL CASTILLO DE XIVERT.
La otra meta de esta excursión por la sierra de Irta es el castillo de Xivert, o de Alcalà de Xivert. Impacta gratamente al visitante esta sólida fortaleza situada en la vertiente sudoeste de la sierra de Irta, a 389 metros de altitud sobre el nivel del mar. Rafael Cebrián afirma que “este castillo es uno de los más bellos, completos y notables conjuntos monumentales existentes en las montañas de la Comunidad Valenciana”. Se mantiene en muy buen estado la sólida estructura arquitectónica del castillo, en donde, además, se realizan desde 1996 actuaciones restauradoras, así como excavaciones arqueológicas, que han permitido comprobar que, ya en este mismo lugar, existían asentamientos humanos durante la Edad del Bronce. Posteriormente, los íberos y los romanos se establecieron también en estas montañas de Irta. Los árabes ampliaron la fortaleza que tenía como centro el alcázar, y que poseía un amplio espacio abierto rodeado de murallas –el Albacar-, destinado a albergar a la población de los alrededores y a sus ganados en épocas de contienda. El castillo de Xivert fue conquistado por el ejército del rey Jaime I en el año 1234, poco después de que Peñíscola fuera también arrebatada a los musulmanes. La fortaleza fue entregada a la orden del Temple, que amplió el recinto amurallado y construyó las dos imponentes torres circulares unidas entre sí. Los templarios utilizaron para la construcción piedras de sillería, pero respetaron los sólidos muros de tapial levantados anteriormente por los árabes, a los que se deben también las torres en forma de cubo. En torno al castillo se creó un núcleo amurallado en el que vivía la población árabe, hasta que fue expulsada en el año 1609, cuando se ordenó que los moriscos abandonaran el territorio español
El ayuntamiento de Alcalà de Xivert ha editado un folleto desplegable sobre el castillo de Xivert, una minuciosa descripción de su historia, dividida en varias épocas, concluyendo la descripción en el siglo XVII. Después se proponen en dicha publicación municipal dos circuitos para la visita del conjunto arquitectónico de la fortaleza de Xivert. En el circuito primero se incluyen el foso, la muralla del sureste, la torre de Mitjorn, la necrópolis, la puerta de Albacar, el aljibe islámico, el solar de la mezquita, la muralla suroeste, la torre de Ponent, el camino de ronda, la torre de Mestral y la torre de la Tramuntana y, en el recinto superior, el aljibe templario, la torre sur, la capilla templaria, las torres gemelas o de los Templarios y el camino de ronda. El otro circuito comprende la muralla del sureste, la porta de la Vila y los edificios públicos del antiguo poblado islámico de Xivert. Existe la posibilidad de realizar visitas guiadas a este castillo de Xivert, contactando para ello con los monitores del Parque Natural de la Sierra de Irta o con el propio ayuntamiento de Alcalà de Xivert. Una ruta turístico-cultural que tiene, además, el aliciente de poder recorrer la sierra de Irta y de contemplar, desde el monte Campanilles, hacia el este, una espléndida panorámica del Mediterráneo y, hacia el oeste, un dilatado horizonte de las montañas castellonenses, entre las que sobresale Penyagolosa, con su inconfundible silueta.